-Gerard he hablado con Frank y me ha contado lo que pasó entre vosotros. Le he visto mal, Gerard, parece que le gustas de verdad...
-Ya lo sé, pero ahora, quiero estar contigo, y tendrá que aceptarlo. Lo siento por el, me ha dado pena decírselo así, pero no había otro modo.
-Bueno, le he tranquilizado y vamos a quedar otro día para hablar las cosas.
-Me parece bien, enserio, no quiero perderle.-El resto del día transcurrió normal. A las 12 de la noche, mas o menos, nos fuimos a dormir los dos a mi cama. Parecía una noche normal, pero no fue así. Cerca de las 4 de la madrugada, sonó mi móvil.
-¿Diga...?-Dije con voz somnolienta.-
-¿Es usted familiar o conocida de Frank Iero?
-Si, ¿quién es?
-Le llamamos desde el hospital, ha tenido un accidente.- Mis ojos se abrieron y mi respiración se aceleró tanto que desperté del todo a Gerard, que estaba moviéndose a mi lado.
-¿QUÉ? ¿Que ha pasado? ¿Donde está? ¿Está bien? Gerard levanta, hay que ir al hospital, es Frank, ha tenido un accidente.
-Lo siento pero no le puedo decir nada por teléfono. Dirigase al hospital y aquí le informarán.
-Vale, gracias, ya vamos para allá.-Colgué.
-¿Que dices Angela?-Dijo Gerard asustado.
-Vamos, vistete, tenemos que ir al hospital, Frank ha tenido un accidente.-Mientras me vestía, empecé a llorar, presa del miedo, temiéndome lo peor. Gerard me oyó y vino a mi lado. Solo me abrazó y yo me tranquilicé.
Salimos muy rápido hacia el hospital y al llegar preguntamos por el. Nos sentamos en la sala de espera y salió un médico. Yo solo podía pensar en lo peor y Gerard me abrazaba para tranquilizarme, pero en su cara veía el verdadero rostro de la preocupación y el miedo. El médico se dirigió a nosotros.
-Hola, ¿son familiares de Frank Iero?
-Si si, somos nosotros.-Contesté ansiosa.-¿Como está, que ha pasado?
-Pues, verás, estaba conduciendo, supuestamente bajos los efectos del alcohol y tubo un choque frontal con otro coche. Los pasajeros del otro coche solo tienen heridas y algún hueso roto, pero Frank... No llevaba el cinturón de seguridad y el golpe fue bastante fuerte.
-Por favor, sin preámbulos, ¿como esta Frank?
-Lo siento, pero está en coma. Aún tenemos que hacerle pruebas, pero por ahora está estable, podéis pasar a verle.-Yo estaba llorando y temblando y Gerard también lloraba. Entramos a una habitación y allí estaba, con respiración asistida, y tumbado en una cama blanca. Yo me acerqué a él.
-Frank, ¿que has echo? Joder Frank... –No paraba de llorar.-¿Que vamos a hacer ahora sin ti? Tienes que recuperarte, vas a recuperarte.-Me derrumbé allí, encima de el, y simplemente le abracé. Gerard vino pro detrás y le acarició el pelo a Frank, pero no dijo nada. El también lloraba, no podíamos creer lo que estaba pasando. Nos quedamos toda la noche allí con él. Yo apenas dormí nada, estaba nerviosa, preocupada y cada vez que intentaba dormir tenía una pesadilla que empeoraba mi estado. De vez en cuando me sentaba a su lado con la esperanza de que se despertara y me mirara con esa sonrisa tan mona que tiene, o le hablaba en voz bajita, le decía que se recuperara, que le necesitábamos y que estaríamos aquí cuando se despertara. Gerard durmió un poco más que yo, en una butaca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario