miércoles, 7 de marzo de 2012

Cap. 20 Por fin

Todos los días iba a visitarle, todos absolutamente. Me sentaba a su lado y le contaba cosas, le contaba mi día, le hablaba de las noticias, le leía una revista o le traía música. Mi relación con Gerard, iba a mejor, pero tampoco demasiado. Desde que decidimos salir del hospital, estaba bastante mejor, de mejor humor y más tranquila, aunque a veces me ponía a pensar, y lloraba, pero gracias a Dios, tenía a Gerard para cuidarme. El me animaba o me distraía con algo si me veía mal. Íbamos juntos al hospital y siempre dormíamos juntos, en su casa o en la mía. No me dejaba sola, cosa que me ayudaba mucho. Seguían pasando los días, y nada cambiaba, así que no hay mucho que contar, claro, hasta que llegó el día más esperado.
Fuimos, como todos los días, a visitarle al hospital. Estaba como siempre, acostado en esa cama blanca, cuando me senté a su lado y me puse a hablarle.
-Hola Frank. ¿Que tal? Confío en que bien-Reí-Pues yo bien, bueno, todo lo bien que puedo estar. Gerard es un gran apoyo, y aunque no le oigas hablar, te echa mucho de menos, y te quiere tanto como yo. Los días transcurren y apenas me doy cuenta, pero ya estoy mejor.-Sonreí y me acerqué para besarle la frente. Después me quedé mirándole, con una pizca de esperanza, pero se me fue enseguida. Cuando estábamos saliendo de la habitación oímos algo detrás de nosotros.
-Hola.-Oímos con una voz bajita y somnolienta.Yo abrí los ojos y levanté la cabeza. Antes de girarme me estaba cayendo una lágrima por la mejilla. Me giré despacio y le miré... Estaba despierto... Me estaba mirando, sonriéndome con los ojos entornados. Me lancé sobre él llorando de alegría. No sabía que decir o que hacer. Mientras estaba abrazada a Frank, vi de reojo a Gerard quieto en la puerta. No sabía como reaccionar, se había echo “el duro” durante todo este tiempo, como preocupado pero no mucho, supongo que para que no le afectara demasiado, pero yo se que en el fondo le dolía ver a Frank así, era su amigo... Pero ahora no sabía que hacer. Nos miraba incrédulo mientras nos abrazábamos y yo lloraba. Al final, nos separamos y Gerard rompió a llorar y se fue directo a Frank. Se abrazaron.
-No me vuelvas a dar un puto susto como este, ¿vale?-Dijo Gerard entre lágrimas. Frank solo le sonrió.

No hay comentarios:

Publicar un comentario